prepara el cazo y amarillea la abitacion, otro lonchazo le pone la pila y lleva la mente la cara de 20, que en la clase es un pringao y esta arto de escuchar
Soy huracan de pasiones rabia incandescente que no se conforma con mirar desde el otro lado del puente y mi casa esta a la deriba pero hoy tengo hambre
Vengo cargao con un escuadron de versos, con un regalo entre las piernas que esta tieso, traigo resaca de un conflicto en mis adentros que estoy curando
Todo nace con la fuerza de un bing-bang, en el seno desquiciado de los organos... Dolor! en los carrillos de la masa me ahogo tanto en la presion...
Se a consumido el reloj, me e comido otra porcion, el nuevo dia despierta, como un ding dong en mi puerta, que sabe a agua despues de cafe, sabe a caricias
Yo le puse el motivo, la poca verguenza, la paciencia y el suspiro, aunque no valga la pena. Meti la llave en su sitio, me libre de una condena, salgo
No me mires cuando mire, sin mirarte entre los poros, de tu piel de terciopelo, de la curva de tus fauces, mirame cuando repose en el cajon de mis raices
Y he coronao con laureles, el dia en que te conoci, y he coronao con laureles el despertar de una esperanza, que vente conmigo a vivi. Me gusta que
En el fondo siempre fui de aire furtivo aunque no arranque ventoleras a la mar siempre de vertientes nulas del acceso de mi mismo no me creo ni mi palabra
Con el negro espeso y el veneno que me dejo hasta el recuerdo por dientes calculo unos cuantos azotes con la plama en el cachete de mi opinion que por
Un carnivoro cuchillo De ala dulce y homicida Sostiene un vuelo y un brillo Alrededor de mi vida. Rayo de metal crispado Fulgentemente caido, Picotea
Te digo que no te vayas. Te digo que no te vaayas. Porque si no estas me empotro contra los escaparates, De una tienda de machetes. Te digo que no hay
Se sento la madrugada En tus ojos de zarzales No ladres mas al vacile Porque vivo como ausente En esta orilla pensativa Frente al mar de la indecisa
Frontera de tus labios soy guardian de los riachos, de los barrancos de ayer y de hoy. Tengo arcilla en la mirada, dos escobas por pestana que van riendo
Mi desafio dio lugar al que fuera campesino de estas tierras agrietadas que algun dia d aran medallas pa colgarme en la solapa ganas de mis galardones
Esta traspuesto el dia y entre estrellas los arboles ronean sin silbidos sonolientos reposan manos de obreros llenas de cal y cemento reposaco con pensantes
(No quiero sombreros de colmo ni quiero...) Robasteis soles de planir en primavera, quebrantos en papel de oro, robustos signos umbrosaron mi quimera
Herrero de los martillos templados al fuego y al agua, y al fuego. Sano arte que en dos vaivenes se lleva el suelo y revuelca en duelo. Herrero de las